Una patente enfrenta a los líderes de la impresión digital

Kerajet demanda a Cretaprint por copia en la tecnología que ha revolucionado la industria cerámica mundial

Kerajet demanda a Cretaprint por copia en la tecnología que ha revolucionado la industria cerámica mundialJavier Alfonso Kerajet y EFI-Cretaprint, las dos compañías de maquinaria que desde la localidad castellonense de Almassora están liderando el cambio tecnológico de la industria cerámica hacia la impresión digital, se verán cara a cara próximamente en un juzgado por un problema de patentes. En concreto, Kerajet, la pionera del sector, ha demandado por infracción de patente a su vecina, denominada EFI-Cretaprint desde que la multinacional estadounidense EFI compró Cretaprint el pasado mes de enero, por 40,5 millones de euros.

Fuentes de Kerajet han explicado a elEconomista que se trata de un procedimiento de infracción, en concreto, de una patente que describía el procedimiento de la primera máquina a nivel mundial que desarrollaba un sistema de impresión sin parada. En la demanda solicita no solo una indemnización, sino que Cretaprint deje de fabricar la máquina con la que supuestamente ha infringido la patente. Fundada en 1999 y participada por la compañía esmaltera Ferro, Kerajet presentó en el año 2000 el primer sistema para imprimir por el método de inyección de tinta sobre soportes cerámicos, que con los años ha sustituido a las técnicas tradicionales analógicas. En 2005, la italogermana Durst y la esmaltera española Torrecid se aliaron para lanzar su propia máquina de impresión digital, mientras Cretaprint lanzó la suya en 2008. Esta tecnología se ha implantado rápidamente en las azulejeras de todo el mundo, que siguen demandado máquinas inkjet para renovar sus líneas o para ampliarlas.

Kerajet, presidida por José Vicente Tomás, continúa siendo líder mundial, mientras EFI-Cretaprint y Durst conservan una cuota de mercado importante, muy por encima de los fabricantes que han surgido en Italia y China.

La demanda de Kerajet es de mayo de 2011, anterior a la compra de Cretaprint por parte de EFI. Por ello, la multinacional norteamericana, que cotiza en el Nasdaq, se cubrió en el acuerdo de compra con una cláusula por la cual los antiguos propietarios de Cretaprint tendrán que indemnizarle en caso de perder el pleito. La multinacional, cuyos servicios jurídicos se han hecho cargo de la defensa, no cree que se pierda el pleito, a pesar de lo cual ha realizado una provisión neta de 2,5 millones de euros en sus últimas cuentas semestrales, que sería recuperada por el acuerdo indemnizatorio con los exdueños.

La demanda no es el único roce industrial entre las dos empresas. El pasado mes de junio, Cretaprint presentó su oposición al registro como modelo de utilidad, por parte de Kerajet, de una máquina de decoración por inyección de tinta.