La Justicia europea blinda la dignidad del embrión

El Tribunal de Luxemburgo prohíbe patentar métodos de investigación con células madre de óvulos fecundados

La Justicia europea dio un portazo ayer a la utilización de células madre embrionarias para la investigación científica. El Tribunal de Luxemburgo rechazó patentar ciertos procedimientos de investigación con células madre al implicar la destrucción del embrión humano, lo que en opinión de la corte atenta contra la legislación de la UE.

«Un proceso que suponga la extracción de una célula madre de un embrión humano en la fase de blastocisto, entrañando la destrucción de ese embrión, no se puede patentar», sentenció el Tribunal. De acuerdo con los jueces, la directiva europea sobre patentes de biotecnología excluye «cualquier posibilidad de patentar algo si el respeto por la dignidad humana puede verse afectado por ello». De esta manera, los jueces no sólo dieron un duro revés a la investigación con células madre embrionarias, sino que también protegieron la inviolabilidad del embrión humano como ser sujeto de dignidad. Más aún, afirmaron incluso que un óvulo no fertilizado que haya sido manipulado científicamente y, por ello, esté «en disposición de iniciar el proceso de desarrollo de un ser humano» debe ser considerado como un embrión a todos los efectos de protección legal.

La sentencia tuvo ayer una acogida desigual entre la comunidad científica. El Centro Europeo para la Ley y la Justicia, un grupo cristiano con sede en Estrasburgo, se mostró ayer satisfecho con el fallo, y afirmó que «protege la vida y la dignidad humana», informa Reuters. Sin embargo, para algunos científicos tendrá consecuencias devastadoras en la investigación para curar enfermedades como la ceguera o el Párkinson. No obstante, hasta la fecha, los tratamientos más efectivos han sido los derivados de las células madre adultas. Así lo asegura César Nombela, miembro del Comité de Bioética de España. «No se va a frenar la investigación. Primero, porque sigue siendo legal y, sobre todo, porque hay 3.700 ensayos con células troncales adultas, y sólo tres con embrionarias».

Denuncia de Greenpeace
El caso fue llevado al Tribunal tras cuestionar Greenpeace ante la Justicia alemana un método patentado por un investigador de la Universidad de Bonn para transformar células madre embrionarias en células nerviosas. La Justicia alemana ya invalidó la patente del investigador, cuya apelación hizo llegar su caso hasta Luxemburgo. «Queríamos una decisión sobre cómo debe establecerse la protección de embriones humanos de acuerdo con la legislación europea de patentes para evitar la explotación comercial», comentó el asesor científico de la organización, Christoph Then.